Cada vez son más los contenidos que generamos en Internet como vídeos, imágenes, comentarios u opiniones. Poco a poco vamos creando nuestra huella digital y siendo más conocidos en la sociedad. En ocasiones esta popularidad es usada de forma mal intencionada por los ciberdelincuentes, que se apoyan en las nuevas tecnologías para cometer fraudes mucho más elaborados y creíbles. En este artículo veremos como el hijo de la familia Cibernauta fue víctima de un fraude basado en deepfakes y como lo solucionó.