¿Has seguido todos los pasos solicitados en algún tipo de sorteo, concurso o promoción? ¿Y para ver un contenido online o descargar algún programa, juego o aplicación? Si es así, es probable que el último de ellos fuese enviar algún SMS o introducir tu número de teléfono y que ahora estés suscrito a algún servicio de tarificación especial, es decir, servicio premium por el que hay que pagar. ¿Te interesa este tema? Sigue leyendo.